Lastur

Siguiendo hacia el interior nos adentraremos en el valle de Lastur un paradisíaco lugar digno de ser visitado y recorrido a pie y sin prisas.

En un extremo del valle se encuentra el diminuto núcleo rural de San Nicolás de Lastur, formado por la ermita de San Nicolás, los molinos de Plazaola, un frontón, apenas cuatro casas y el albergue, donde podremos visitar el espacio interpretativo del Karst y conocer a través de paneles informativos, fotografías e ilustraciones la historia y tradiciones de este valle, su vínculo con la piedra y sus características geológicas, así como las formas de vida y costumbres de sus habitantes. Un valle donde el caserío, las cuevas, el agua, la piedra caliza y los toros son los grandes protagonistas.

El valle de Lastur aparece ya mencionado en un documento de 1.335 en el que el rey Alfonso XI, a petición de las ferrerías del valle, autoriza la tala de árboles en los montes comunales próximos. Con el paso del tiempo, las ferrerías del valle se convirtieron en molinos y testigo de ello son los molinos de Plazaola, que en perfecto estado de conservación y funcionamiento pueden ser visitados.

Desde la mismas plaza, junto a la ermita comienza el sendero PR-46 o Ruta del Karst. Un recorrido de gran valor paisajístico y geológico por el corazón del Geoparque.